Ésta de albóndigas resulta muy apetecible, es un caldo que ha hecho siempre mi madre, y me trae muy buenos recuerdos desde pequeña tiene un olor y sabor muy particular, para la cena es ideal como plato
único.
Lo más sorprendente son los pocos ingredientes que llevca. Comenzamos poniendo en la olla hueso salado de ternera blanco, una
cebolla, un hueso
de jamón o manteca rancia, que haga el caldo clarito y dejamos cocer bastante
hasta que salga espuma y la apartemos.
Una vez retirada la espuma y habiendo hervido en la olla una
media hora los huesos agregamos una pastilla de avecrem, una cebolla y las
albóndigas (que ya tendremos preparadas), las pasamos una a una por harina y
las agregamos al caldo. Tapamos la olla y cuando comienza la válvula a dar
vueltas contamos 20 minutos y destapamos.
En un
cazo apartamos la cantidad que vayamos a necesitar para el momento, y cuando hierva
agregamos fideos, galets, lo que nos apetezca, y en cada plato ponemos 3 o 4 albóndigas.
NOTA: el hueso salado mejor pasarlo por el grifo antes de añadirlo, ya que puede provocar un extra de sal.
Os sorprenderá el resultado con tan pocos ingredientes.
BON PROFIT 😋
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